El ductus arterioso es un conducto que comunica en forma normal la arteria aorta con la arteria pulmonar durante la vida fetal. Su función consiste en desviar hacia la aorta la sangre que viene del ventrículo derecho ya que los pulmones aún no están funcionando. Este conducto se cierra por sí solo en los primeros días de vida. A veces, el mecanismo de cierre espontáneo falla y el ductus queda abierto, constituyéndose la patología llamada ductus arterioso persistente.
Una vez que el niño nace, los pulmones comienzan a funcionar y la presión de la arteria pulmonar progresivamente disminuye. Si el ductus permanece abierto, la sangre pasa desde la aorta hacia la pulmonar. Los pulmones se sobrecargan de sangre (hiperflujo pulmonar) quitándole flujo al resto del organismo. La cantidad de sangre que pasa de un lado al otro dependerá básicamente del diámetro del ductus y de la resistencia de las arterias pulmonares.
Viviana Pérez, médica del Hospital de la Madre y el Niño e integrante del equipo que llevó a cabo la cirugía, comentó que “cuando nacemos, ese ductus debe cerrar con normalidad, pero en algunos pacientes, sobre todo si son prematuros, como fue este caso, el ductus permanece abierto porque no ha llegado a madurar el proceso de cierre”.
“La intervención se realizó por la parte lateral izquierda del tórax, se identificó el ductus y se formó una ligadura. La operación fue exitosa, y el paciente se encuentra internado en plena recuperación en la unidad de cuidados intensivos de neonatología” informó Pérez
El paciente es un chico prematuro de 1 mes de vida, pero que nació antes de término y pesaba alrededor de 2 kg.
“La importancia de este tipo de cirugía es que antes se derivaba a los pacientes a otras provincias, lo cual implicaba un alto costo para la provincia, además de tener que movilizar una familia hacía otra ciudad, que generalmente era Buenos Aires o Córdoba. En la actualidad el Hospital de la Madre y el Niño cuenta con la aparatología necesaria y recursos humanos capacitados para concretar operaciones quirúrgicas de este tipo” detallo la médica integrante del equipo.
La Dra. Paulina Rizzo fue designada médica de cabecera del bebe operado de ductus, es ella quien custodia permanentemente al bebe, en el marco de ver y seguir todo el tratamiento que necesita (laboratorio, estudios, etc) para ir estabilizándolo.
“Al paciente se le realizaron todos los estudios necesarios y fue mediante un ecocardiograma donde se descubrió el ductus de este bebe, que por el tamaño probamos primero con un tratamiento farmacológico y al no responder al mismo, hubo que hacer una cirugía” comentó Rizzo
El equipo quirúrgico que participó en la operación está compuesto por profesionales de los Hospitales de la Madre y el Niño y Vera Barros: Dr. Alejandro Flores, Dr. Segovia, Dra. Silvia Pérez, la jefa de Quirófano Dra. Silvana Chagaray y los instrumentadores quirúrgicos Fernando Rodríguez y Gabriel Herrera.