Cuánto cuesta hoy en dólares «blue» el auto más barato de la Argentina

Terminó una semana agitada por la suba del “blue”. Cuando eso sucede, el mercado automotor se mueve al ritmo de la cotización de la moneda estadounidense. Es por eso que, en los últimos días, las concesionarias recibieron numerosas consultas para adquirir un 0km. En algunas marcas, el incremento de la demanda es de un 50% respecto a junio.

Con vehículos con precios en pesos, fijados en base al valor de dólar oficial, la brecha cambiaria es un incentivo para la compra de autos.

Para los ahorristas dolarizados, la suba del billete paralelo implica que los 0km se “abarataron” medidos en esa moneda.

Para tener una idea de cómo impacta la devaluación en los precios de estos bienes, es bueno tomar como ejemplo al modelo más accesible que se vende hoy en el mercado.

El auto más económico en la Argentina es el Chery QQ que, según la lista oficial de julio de la marca china, cuesta u$s11.000. Este valor es en base al dólar oficial, lo que equivale a $1.111.000.

Ayer, la cotización del “blue” cerró en $185. Es por eso que quien quiera comprar este vehículo deberá desembolsar 6.000 dólares billete.

Tradicionalmente, el país de la región con los autos con los precios más bajos es Chile. Al tratarse de una economía abierta que, además, no fabrica vehículos, permite una fuerte competencia.

El modelo más barato del otro lado de la cordillera es el Suzuki Alto 800 GL. Su precio es de u$s6.546.

Es por eso que con el salto del “blue” de los últimos días, la Argentina alcanzó un hecho poco frecuente: tener los 0km más baratos que en Chile y, obviamente, de la región.

En tanto, el modelo Chery, en el mercado trasandino, tiene un valor u$s7.800, muy por arriba de lo que cuesta en la Argentina.

Hay que remontarse a abril pasado, cuando el “blue” cotizaba a $140, para encontrar un precio similar al del Chery chileno.

En ese momento, en el mercado argentino, el QQ costaba 7.900 dólares físicos.

Pese a que esta situación cambiaria llevó a mucha gente a las concesionarias, el problema que se encuentran los interesados es la falta de unidades.

Las trabas a las importaciones y los problemas para que las fábricas produzcan al ritmo necesario, por distintos motivos, generan un desabastecimiento del mercado.

Esto hace que las operaciones no se puedan cerrar y, en caso de que la concesionaria tenga stock del modelo buscado, su valor ya deja de ser el de lista. En muchos casos se piden sobreprecios de entre 10% y 20%.