«El orzuelo es una inflamación de las glándulas del párpado que generalmente se presenta en los chicos que necesitan anteojos. Comienza por una caspa, después se inflama y una de las glándulas se tranca y se presenta esta patología», explicó.
El doctor agregó que en caso de presentarse un orzuelo, se debe consultar al oftalmólogo, quien además hará el diagnóstico por la necesidad de anteojos.
Aclaró que “también en otras personas puede presentarse como consecuencia del cansancio, el estrés y en algunos casos debemos hacer una pesquisa para evitar una hiperglucemia que pueda llevar al paciente a una diabetes o algún otro problema dermatológico».
Las enfermedades de la piel asociadas con el ojo pueden provocar un orzuelo y patologías de ojos secos, que son más frecuentes en los chicos en edad escolar que no utilizan anteojos, aunque pueden aparecer en cualquier momento.
Además hay adultos que presentan la patología por trastornos metabólicos o cuando tienen cataratas.
«El orzuelo, si no revienta espontáneamente, pasa a llamarse quiste y requiere de otra entidad quirúrgica para el tratamiento de la resolución”, agregó el profesional.
Precisó que existen grados de orzuelos: “Cuando apenas está inflamado se resuelve espontáneamente; cuando está infectado va contaminando a la glándulas de la par y abarca más en cuanto al tamaño”.
¿Cómo se trata?
Al orzuelo se le debe dar calor, por ejemplo, calentando un pañuelo con la plancha o frotando un anillo de oro para producir la madurez rápidamente y ablandar el contenido y que la glándula logre expulsarlo. La persona que presente esta patología no debe tocárselo o presionarlo.
«De acuerdo al tipo de glándula comprometida, el oftalmólogo debe recomendar el antibiótico adecuado para ese orzuelo. A las personas que presentan mucho dolor también se les pueden dar por vía oral un analgésico o antiinflamatorio”, aportó Dilascio.
La presencia del orzuelo genera daños en la vista cuando comienza a drenar por el cambio del PH de la lágrima. El ojo, aparte de doloroso, se vuelve rojo e irritado y el paciente empieza a ver borroso. Pero esto es solo una patología benigna que se cura sin secuelas.
El médico quejo que «es recurrente generalmente en quienes tienen cutis graso o algún tipo de acné. Una vez pasada la pubertad suelen disminuir o eliminarse.
“Lo que debemos saber siempre es que un orzuelo no esté indicando la presencia de alguna otra patología que debe ser tratada”, culminó.
