A tal fin, la Intendenta informó que desde el gobierno local se elaboraron distintos protocolos de funcionamiento, que garantizan las medidas de bioseguridad para cada uno de los sectores, y la implementación de otros destinados a brindar garantías a la población ante la emergencia sanitaria por la presencia del COVID19 en la ciudad.
Por ello la intendenta Inés Brizuela y Doria, el viceintendente Guillermo Galván y funcionarios del Ejecutivo recibieron hoy, en primer término, a las autoridades del Centro Comercial e Industrial; y seguidamente a representantes de casas de electrodomésticos y financieras, que se mostraron dispuestos a trabajar para poner en funcionamiento las normas que se dispongan para la atención al público de manera ordenada.
A la mesa de trabajo, los comerciantes llevaron propuestas que se están implementando en otras provincias y que sostienen normas sanitarias de higiene y seguridad para prevenir la difusión del virus y proteger a los empleados.
Las autoridades municipales dejaron en claro que actuarán en el marco de su competencia, poniendo a disposición protocolos de funcionamiento esenciales, como la distancia y cantidad de personas dentro y fuera de los locales, la atención por turnos, la disponibilidad de servicios a domicilio, la frecuencia en la desinfección de superficies, el uso de barbijo, la disposición de elementos de higiene como el alcohol en gel, etc., pero aclararon que la puesta en práctica está supeditada a la disposición que en general adopte el gobierno de la provincia respecto de la flexibilización del aislamiento obligatorio.
Asimismo, los funcionarios plantearon la necesidad de ir de a poco habilitando ciertas actividades, para evitar la ruptura del entramado económico y social y proteger las fuentes laborales y de ingresos genuinos, siempre conservando y observando en forma estricta las condiciones en las que se habilite el funcionamiento de los distintos sectores, teniendo en cuenta el objetivo superior de proteger la salud de la población.
En tanto remarcaron que es necesario poner en marcha una nueva etapa de la cuarentena, administrando la circulación de personas por criterios que sean claros para todos, apelando a la responsabilidad y a la solidaridad para no poner en riesgo la salud pública y continuar cuidándonos entre todos.
También observaron la necesidad de una evaluación permanente de la situación teniendo en cuenta los criterios recomendados por el gobierno nacional la semana pasada, para ajustar las disposiciones en forma paulatina.